Pasar al contenido principal

Perspectiva y Futuro de la Medicina Basada en Evidencia – Conferencia

  • foto

El pasado 23 de Agosto se realizó la Conferencia Virtual “ Perspectiva y Futuro de la Medicina Basada en Evidencia” desarrollada por Ricardo Carreño Escobedo, coordinador del Diplomado en Medicina Basada en Evidencias, dirigida a todos los profesionales de la salud del sector público y privado, con el propósito de brindar la oportunidad y desarrollo de la Medicina Basada en Evidencia para recolectar la mejor información disponible y que pueda ser individualizada a los pacientes en los distintos tratamientos.

En la conferencia se explicó que la palabra “evidencia” hace referencia a todo aquello que está demostrado para tratar, curar o controlar alguna enfermedad. Ha pasado por un proceso riguroso de colecta de información, análisis bioestadístico y de comprobación de eficacia de específicos tratamientos para que sean aplicados en una determinada población. La Medicina Basada en Evidencia se fundamenta en la clínica, es decir, en el tratamiento de los enfermos.

“Con el crecimiento de la Medicina Basada en Evidencia es contundente que los tratamiento tienen que ser verificados por esta nueva disciplina, también llamado Programa Mundial “ explicó el Maestro Ricardo Carreño.

La Medicina Basada en Evidencia tiene una historia corta, fundamentada a mediados del siglo XX en Francia. Antes se cuestionaba que la experiencia no era la mejor fuente para tratar a los pacientes. Luego esta tendencia del uso de la Bioestadística pasó a desarrollarse en Gran Bretaña y Estados Unidos. “Su propósito se desligó de la epidemiología clínica y se enfocó para curar y tratar pacientes. Antes se cometían muchos errores. Por ejemplo. Antes se creía que la Lidocaína servía para el tratamiento de infartos en los años 70 y 80, hasta que se realizó una revisión sistemática que demostró que no ayudaba para nada a los pacientes”, ahondó en el tema Ricardo Carreño.

Otro ejemplo es el uso de la Silverdiazina que se usaba como antibiótico usado para los pacientes quemados en la época de los 80 y 90, causando gran mortandad a pesar del tratamiento. El problema era que no había una evidencia que demostrara los efectos, con la rigurosidad afianzada en la bioinformática.

En nuestro país recién han llegado guías aprobadas bajo la Medicina Basada en Evidencia recién a partir del 2005. Estamos atrasados aun pero encaminados.

“Las casas de estudios necesitan profesionales que no solo conduzcan por competencias de acuerdo a conocimiento médico sino que aseguren que lo que están aprendiendo tenga un fundamento científico ligado a la Medicina Basada en Evidencia”, resaltó Ricardo Carreño agregando que esta disciplina también es muy útil para el desarrollo de las tesis.

“Por el lado del diagnóstico están cambiando y la medicina nos puede ayudar a encontrar mejores resultados y no caer en sobrediagnósticos. Antes el médico más experimentado era el más buscado, ahora puede ser un médico joven que está usando la Medicina Basada en Evidencia y puede tener tan igual resultado que el otro. Es una gran oportunidad para que los médicos se desarrollen rápidamente como profesionales”, finalizó el Maestro Ricardo Carreño.